Discapacidad y ciudadanía

Más allá de las cuotas: hacia entornos laborales inclusivos


Por: Eduardo Marchant


El trabajo es uno de los numerosos y variados ámbitos en que las personas con discapacidad se encuentran en una situación de desventaja frente a las personas sin discapacidad.

En sus intentos por acceder al mercado laboral, las personas con discapacidad usualmente se enfrentan a estereotipos o percepciones sociales negativas, que las marcan como personas “inhábiles o no aptas para el trabajo” o trabajadores “ineficientes o menos productivos”. Incluso, cuando logran incorporarse al mercado del trabajo, es frecuente que se encuentren con entornos laborales inaccesibles y con la falta de los ajustes razonables necesarios para el adecuado desempeño de sus funciones. De tal manera que las personas con discapacidad están expuestas a barreras en el acceso al trabajo y a barreras en el entorno de trabajo.

En Chile, los datos oficiales (ENDISC 2004 y 2015 y ENDIDE 2022) han expuesto sostenidamente una brecha significativa entre la tasa de ocupación de las personas sin discapacidad (62% en 2022) y la de las personas con discapacidad (40% en 2022). La existencia -y subsistencia- de esta brecha explicaría que las iniciativas legales en materia de inclusión laboral de personas con discapacidad se hayan centrado en las barreras en el acceso al trabajo. Aquí encontramos las paradigmáticas cuotas de empleo para personas con discapacidad, dispuestas en nuestro país, tanto para el sector público como para el sector privado, en virtud de la Ley Nº21.015.

Sin embargo, las barreras en el acceso al trabajo son sólo una parte o dimensión del problema. La efectiva inclusión laboral de las personas con discapacidad necesariamente implica preocuparse también por las barreras en el entorno de trabajo, a través de la examinación de las condiciones materiales e inmateriales en que los trabajadores y las trabajadoras con discapacidad se desenvuelven. Esto se traduce, en la práctica, en la efectiva implementación de las medidas de accesibilidad y de ajustes razonables en los entornos laborales, aspecto que hasta el día de hoy ha sido deficiente en nuestra legislación.